Pero no es suficiente con el destierro, no se conforman con eso. Lo dice Ignacio Escolar en su artículo. No les gusta el exilio del juez Garzón al Tribunal de la Haya. La oferta de Luis Moreno Ocampo, el fiscal general de la Corte Penal Internacional ha indignado al juez Varela, que se puso manos a la obra a ordenar el juicio oral, a pesar de los múltiples recursos que tiene por responder.
"El sector conservador del Consejo General del Poder Judicial se alió ayer con las prisas del Tribunal Supremo para suspender cuanto antes de funciones al juez Baltasar Garzón. Siete vocales del ala afín al PP forzaron ayer con sus firmas la convocatoria de un pleno extraodinario urgente para mañana, viernes, a las once. Con un único punto en el orden del día: apartar a Garzón de su juzgado de la Audiencia Nacional".
No puedo evitar pensar en aquel último parte de guerra con el que se liquidó una contienda que puso fin al gobierno de la República: "En el día de hoy, cautivo y desarmado el Ejército Rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares". Así quieren a Garzón, cautivo y desarmado, además de humillado. No bastan nuestras voces y las de juristas de todo el mundo. Garzón no debe tener ninguna salida.
Varela y los suyos no pasarán a la historia por sus grandes hechos en pro de la justicia, como lo hará Garzón, por intentar establecer una justicia internacional, que condene a los asesinos sin importar el tiempo y el espacio. Pero probablemente nos servirán para explicar lo que significa la "vendetta".
La viñeta es de Vergara en Público
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