8.9.09

LOS SUEÑOS DE CAMPS

LO PEOR SERÍA QUE SE CUMPLIERAN TODOS SUS SUEÑOS.
Los sueños de Camps, que casi subido al cielo, desatado -dice Josep Torrent en un artículo titulado A peor, en el País de ayer- gritó en la Plaza de Toros el viernes pasado "Yo quiero democracia, libertad, justicia, trabajo y sueños".
Y sueña, seguro, con un mundo en el que nada es imposible, pues la realidad se ha ido ajustando a la ficción en la que vive, de tal manera, que no le resulta vergonzoso clamar justicia, ni democracia, ni libertad. Pero su sueño, nada tiene que ver con los sueños de otros políticos y estoy pensando en Martin Luther King que dijo"Yo tengo un sueño" en agosto de 1963 en la marcha sobre Washington, reclamando los derechos civiles para los negros, cinco años antes de morir asesinado.
Los socialistas y las socialistas soñamos en que un mundo mejor es posible
¡Y quién no sueña! Sigue Torrent en su artículo
[...]"Y quién no. El problema, su problema, es que en la Comunidad Valenciana, donde gobierna, la calidad de la democracia es pésima. Sólo hay que ver la banalización y el uso autoritario que de las instituciones hacen él mismo y su partido. Las Cortes Valencianas son el paradigma del deterioro democrático existente.
Reclama libertad. Lo tiene fácil: Basta con que ordene al nuevo director general de RTVV que abra Canal 9 a la oposición para que se exprese en igualdad de condiciones a las de su partido o que trate a los medios de comunicación privados de acuerdo a razones objetivas y no en función de su proximidad al poder. Camps, en esto de los medios, está muy cerca de Berlusconi: Utiliza los suyos -que pagamos entre todos- y los que tiene coaptados para tapar la boca a sus adversarios.
Pide justicia. No estaría de más que la presunción de inocencia que ha venido reclamando para sí y los suyos la exigiera para los otros. Y trabajo, para los parados se entiende. Y qué hace su gobierno para llevar adelante políticas activas de empleo, aparte de presentar una y otra vez planes que no son más que humo. Convertido su gobierno en una macroconcejalía de ferias y fiestas, no hay tiempo ni dinero para invertir en economía productiva. Toda su filosofía consiste en apostar de nuevo por el ladrillo y cargarle a Zapatero el muerto de los parados valencianos. Una política que da votos, pero no resuelve los problemas. No estaría de más que iniciara un diálogo social de verdad con empresarios, sindicatos y la oposición para ayudar a salir de la crisis [...]
El presidente tiene sueños. De hecho, vive en un sueño permanente [...]
Leedlo todo
http://www.elpais.com/articulo/Comunidad/Valenciana/peor/elpepuespval/20090906elpval_4/Tes

No hay comentarios:

Publicar un comentario